Política de "altas miras"

Desde que en 1982 se comenzaron las observaciones en la cueva de Altamira parecía claro que pronto iba a ser necesario restringir las visitas. Finalmente, tras abrir la Neocueva parecía que ya nunca se iba a poder visitar la original... nada más lejos.

Hoy varios periódicos publican la noticia de la inminente reapertura de la cueva.

Por supuesto, nadie dice nada al respecto, puesto que se trata de una decisión más política que "científica". Con la creación del nuevo Patronato de Altamira que este año preside nuestra Ministra (omitiré el "querida") González Sinde, se da vía verde a la reapertura de la cueva en base a un informe de estado del CSIC que no dice que se mantenga cerrada, pero tampoco que se abra.

Tras la apertura de la Neocueva, Altamira ha aumentado sus visitas considerablemente con cientos de miles de visitantes al año. Por ello, aludir a causas económicas sería absurdo... no se va a ganar más. Supongo que esa maldita obsesión por los originales que nos come por dentro tendrá algo que ver.

Pero el anuncio que más me llama la atención es el de que Obama vaya a ser el primero en visitarla, lo cual abre la puerta a una serie de visitas elitistas y seguramente políticas que desvirtúan aun más el proceso en sí.

Antes de cerrar las cuevas, ya existía un modelo muy restringido de visitas. Y ese mismo modelo era agresivo para la cueva. Si van a ser tan restringidas como para no ser tan agresivas ¿Cuál es el objeto de abrirlas? Me parece una decisión sin pies ni cabeza.

-

Pero ahora viene el fondo de la reflexión... Se supone que en ese patronato hay especialistas de renombre conocedores de los riesgos que entraña la presencia continuada de gente en las cuevas. Junto con Lascaux, Altamira es posiblemente la representación máxima del arte Paleolítico. Es una de esas cosas que efectivamente representan la universalidad que busca la UNESCO porque no se restringe al patrimonio de un estado, sino al primer (y mejor) legado "artístico" de nuestros antepasados. Si tuviéramos que poner en una balanza preservación eterna o disfrute efímero ¿qué elegiríamos? En este caso tenemos una reproducción EXACTA de la cueva al lado, con un museo que cumple con lo más altos estándares de calidad en exposición, formación e investigación.

¿Por qué? Esa es mi pregunta ¿Por qué?

Creo que el Ministerio de Cultura tiene cosas mucho más importantes de las que preocuparse (en patrimonio) como la reforma prometida de la ley 16/85 (llevamos mucho tiempo esperándola), o la defensa de un sector que está en quiebra total gracias a un sistema insostenible que convierte al patrimonio en un mero objeto de mercado.

González Sinde... DIMITE (hasta ahora solo has demostrado ignorancia e incompetencia)

Revilla... Puedes invitar a Obama sin necesidad de reabrir las cuevas, iba a perjudicarlas menos.

.