Me cago en mi patrimonio

Entonces pusieron en valor la 'muralla' y la gente se cagó en su patrimonio.

Este es el titular que yo le pondría a la noticia en cuestión, acaecida en la localidad alicantina de Xàbia.
-¿Qué prefieres? Te doy a elegir entre 10 plazas de aparcamiento en tu calle, o poder ver medio palmo de una reconstrucción de la antigua muralla cada día que salgas a la calle.
-Pues es que yo prefiero aparcar cerca de casa, ¿sabe?
-No me diga eso, que es que la consellería nos obliga a hacer algo.
-¿Pero ha venido aquí el Conseller a verlo?
-Es la ley.
-Pues vaya mierda de leyes que tenemos... Aquí tiene 400 firmas de todos los vecinos de la calle. Queremos que quiten esa muralla de pacotilla ¡ya!
-Si estuviera en mi mano...

Y así, los vecinos de Xàbia protestan contra una de las geniales ocurrencias que se extiende cada vez más por nuestro país. La 'puesta en valor' no significa reconstruir murallas en medio de calles, o conservar la cimentación de un edificio en una estación de tren. No consiste en entorpecer la circulación, en modificar proyectos hasta que se arruine la constructora, en molestar, en ocultar, en gastar... La puesta en valor significa simple y llanamente lo que dice: poner en valor. Por eso, cada vez que hacemos cosas así, estamos haciendo otro agujerito en el casco de nuestro barco... Y la gente no nos apoya cuando pedimos proteger el patrimonio. Y la gente no nos cree cuando le decimos que el patrimonio también es suyo. Y la gente crea estereotipos que son más reales de lo que nos gustaría.

Epic Fail Valencia